El término Panaché viene del latín penna. Este, a su vez, derivó a la palabra panaché, cuyo origen es Francia. En España también se utiliza, y su definición, según la RAE, es la de un plato preparado con diversas verduras cocidas.

¿Qué es el panaché?

Parece sencillo. Un panaché se trataría únicamente de un plato de verduras cocidas. No obstante, un buen panaché dista mucho de esto. Lo primero que hay que hacer es seleccionar correctamente las verduras, tanto por su textura como por su sabor y aroma. En un panaché las verduras siempre son frescas, aunque se pueden incorporar verduras congeladas, como las espinacas, únicamente si aportan algo positivo al plato.

Una vez se eligen los ingredientes, el secreto del panaché es cocer las verduras en su propia agua, a una temperatura más bien baja. En algunos casos, se puede aprovechar el agua de una verdura en otra, pero siempre vigilando la mezcla de los sabores. Una vez se cuezan, se irán colocando una a una en una bandeja.

La evolución de la palabra panaché

La palabra panaché, como muchas otras palabras, ha ido evolucionando, tanto en nuestro país como fuera. Es más, en Francia, esta palabra tiene significados bastante sorprendentes que nada tienen que ver con la fuente de verduras cocidas en su jugo. Para los franceses, panaché también sería la combinación a partes iguales que se utiliza con distintas bebidas. Sí, generalmente la mezcla de gaseosa con limonada.

De esta forma, panaché hace referencia, en Francia y aquí, a la mezcla de otros ingredientes. No sólo en la cocina salada, también en la cocina dulce. Seria mezclar dos o más ingredientes de un color, sabor o forma diferente.

Las judías panachés, por ejemplo, son una mezcla a partes iguales de judías verdes y alubias blancas. Asimismo, es una técnica de preparación de helados y bombas heladas, en la que se alternan colores y sabores.